CIELO

De repente sos vos,
te enamoras del viejo cielo azul, vaya a saber uno cuantos años tiene, si es que los tiene.


De repente sos vos con el cabello suelto y te enamoras de la vida,

de las pestañas curvas que trae,
de los caminos que te muestra,
sos vos con un lapicito en la mano,
escribiendo a la media noche verbos que te hacen libre.


De repente y es que llega de golpe,
te sumerges entera en un río,
caminando descalza te sumerges,
y no es posible nadar sin volar,
reír sin querer, sin tener ganas.


De repente,
con la risa vestida en los labios, caes en un precipicio,
un vuelco en el corazón te revuelve el alma (la ordena mejor de lo que puede),
y ya no estas como quien corre lleno de risa,
solo caminas enamorado de la vida,
con el cabello en el rostro por tanta brisa,
por tanto viento,
por tanta vida.