REMEMBRANZA.

Septiembre 29, 2015.



MUSA.

Voy sujeta a su mano,
colgándome entre sus dedos, dando pasos al aire,
donde sus labios se han convertido en camino,
su espalda ha sido ruta,guía, tropiezo,
su risa se vistió de árbol, sus palabras de viento.
Sus pies fueron engullidos y se convirtieron en alas, no corre, vuela.
Sus brazos adoptaron la suavidad de una pluma y yo me sentí libre,
porque no era ella ni ave,
 ni ángel,
era libertad y más que libertad,
era felicidad conjugada con la carcajada de un niño hambriento y un hombre que en medio de su ebriedad,
renació en verdad.