13, SEPTIEMBRE.

Sempiterno,
lluvia,
viento,
risa,
amor,
cielo,
viaje en tren,
en barco, de camino al sur,
magia,
musa,
arte.

Al cielo, invierno que habita septiembre, trece de septiembre, martes, domingo, llega que se va. Camino. ¿Camino de donde, a dónde?. Hogar.

Bendito el universo que trajo consigo la muestra de la realidad, bendita la risa que trajo el viento y se fue con él, bendito todo, los pasos, la firma hecha huella, el anhelo cálido de quien mira con amor, de quien toca con amor, de quien besa con amor, de quien acaricia con amor, de quien toma la mano con amor, de quien folla con amor y todo con amor, la vida y el amor. La risa y el amor.

Trece de septiembre, quien nos olvida somos nosotros mismos, más que el amor, el cabello suelto, la magia constante, el cuerpo desnudo, el alma frágil, grácil, suave, solitaria y hasta a veces pesada. Vamos, que todos somos estaciones, una fiesta vendrá, la vida obsequiará un abrazo, el universo, una coincidencia . No se olvida la risa. Las manos escritas, las palabras pintadas, el beso dado, el abrazo fundiendo dos cuerpos. Septiembre recordará una historia con las manos sueltas, guardará en la memoria un beso que viaje el encuentro. No olvidará, de hacerlo, está la poesía.